Anoche, cuando el linchamiento, oh Charlie Parker,
oh Charlie Parker,
algo así como un río de muchachos y yo,
oh Charlie Parker,
deambulábamos sin sur por las erguidas calles de la ciudad traidora.
Un aroma de pan caliente,
conspiradoras madreselvas, de algún lugar venidas, o enviadas,
mensajeras palomas,
aún al rojo las ascuas de la fragua, ha, ha, ha,
(un disfraz de ceniza)

y perros sin horizonte
disputándose en lucha silenciosa un gato mal-criado
quién diría que a un salto, entre gemelas torres,
nardo y clavel se besan dulcemente, escondidos,
sin siquiera un rumor, como dos asesinos...

PIDO que quien perturbe el amor,
los que lapiden con ruidos, silbar, pateo, zapateo o canto,
el delirante insomnio de pétalos en lucha,
en errantes caínes conviértanse!

Dos disparos, BANG, BANG,
y adornará  tu frente una madeja roja,
una tajada de sandía el corazón,

¿Una ofrenda de espigas, un cesto de cerezas?
harlow desmelenada va a llover sobre vuestras esposas,
porque es llegada la hora del Amado y buster keaton ya,
va inundando de incienso los urinarios públicos,
algo debe nacer mientras sirena y penderecki suenan
y el dies irae anega el mar ¿un rifle-pez en puerta oscura?


Hosanna, hosanna, puede que las escamas
cubran los adoquines de cerebros de níquel.